
A mediados del 2008 me encontraba estudiando
Ingeniería. Ahí conocí a un reducido número de compañeros -porque
solo éramos 33 (como los mineros)-.
En la segunda semana del año
académico, fui invitado por algunos de los del curso para estudiar en las
tardes. No aprendí nada con ellos. Solo nos reíamos y conversábamos, pero
nos hicimos muy buenos amigos.
En el grupo habían varias personas curiosas por lo esotérico, y con ellos,
aprendí bastantes cosas.
Un día que nos juntamos a estudiar en la casa de uno de los del grupo, me
contaron que el día anterior habían visto un video demasiado bueno, el cual
trababa sobre el poder de la mente. Me explicaron que todo lo que queremos lo
podemos tener, solo debemos pensar en ello y llegará a nuestras manos.
Curiosamente, mi mamá había visto el mismo documental el mismo día que mis
amigos, pero en la casa de una de sus amigas.
Yo, un niño ingenuo, desligado de la Iglesia desde los 12 años, sin saber mi
vocación y con muchas inquietudes, sentí que sería lo mejor conocer esto, pues
¿quién no ha soñado con tener una varita mágica o un genio de una lámpara? Este
“secreto” era lo más cercano a lo que siempre había soñado.
Me conseguí de inmediato el video y lo vi (obvio) ¡Me encantó!, sentí que era
verdad y que no tenía nada de malo. Mis hermanos (de 17 y 10 años) lo
consideraron demoniaco, y yo pensé que eran unos graves.
El documental dice que todo lo que queremos lo podemos conseguir. Para eso
debemos pensar mucho en nuestro deseo, sentir que ya lo tenemos, dar gracias
por tenerlo, y después “lanzarlo al universo”, para que éste, nos lo devuelva
materializado.
En el video se muestra gente que desea fama, aceptación, casas, autos,
etc. Se argumenta que no es malo porque no se puede utilizar para hacerle el
mal a nadie.
El argumento que a mí me capturó, y que es lo más potente, es el que dice que
cuando pensamos en una persona, pronto la vemos, porque "la atraemos con
el pensamiento". Eso siempre me ha pasado, y fue lo que me convenció
completamente de creer en tal teoría (y a muchas personas les pasa).
La verdad es que no sé si creía absolutamente en esto, pero sí pensaba que era
muy certero. Como mis hermanos decían que se trataba de algo diabólico, yo me
mantuve alerta para no dejar de creer en Dios, pues me lo tomaba como que mis
pensamientos serían oración.
Creo que mi manera de comprender el concepto no era de lo peor; por supuesto
que estaba a un abismo de ser el correcto, pero poco a poco fui descubriendo
que son muchos quienes están en situaciones “alarmantes” en comparación a la
mia.
El secreto tergiversa el concepto de
Dios. Habla de una “energía del universo” compuesta por todos, que algunos
llaman pacha-mama, energía de la naturaleza, energía del universo, buda, o
“Dios”.
Estas observaciones las encontraba medias extrañas, y por eso prefería
practicarlas a mi manera, -pese a que mis hermanos insistían con que esto no
era de Dios-.
Yo, después de conocer el secreto, no me quedé conforme, quería saber un poco
más para perfeccionar esta capacidad (que en ese entonces creía
poseer). Es por ello que me dediqué a investigar más sobre el tema y
me encontré con muchísimos artículos, páginas, libros, etc., y a esto le
llamaban -y le siguen llamando- “metafísica”.
Siempre he creído en Dios y espero siempre hacerlo, y pese a que estaba
creyendo en esta basura, nunca Él permitió que me alejara de su lado, aunque
estuviera con esa venda, y es por eso que pude abrir los ojos, pero
desgraciadamente, no todos tienen la posibilidad de recapacitar como lo hice
yo.
Para los entendidos en los temas de religión esto se ve bajísimo, estúpido, y
demasiado evidente que es malo, pero déjenme decirles que ustedes son un grupo
de personas muy reducido, y dentro de quienes se hacen llamar “católicos”, está
lleno de gente que cree en este tipo de cosas porque carecen de la formación
necesaria para poder reconocer males de esta naturaleza.
Después de la conversación con una mujer que, luego de practicar mucho “el
secreto” piensa que se puede poner al mismo nivel que Dios (sin entender cómo
se originó el mundo ni conocer otras realidades que “su don especial”), y de
haber recapacitado mucho sobre el tema, tengo la sensación de que Dios se
ensañó en aclararme bien la película, y comenzó a hacerme llegar conocimientos
para que pueda comprender mejor las cosas.
En marzo aproximadamente, del mismo año, en el canal History Channel, mostraron
durante toda una semana reportajes sobre el apocalipsis (me parece que fue
antes de semana santa). El tema me encantaba, porque estaba muy intrigado en lo
que sucedería el 2012. ¡Los vi todos!, y en esos programas hablaron del
anti-cristo y de la forma en que llegaría a la tierra (entre otras cosas).
Hablaron de los cuatro jinetes, de la profecía de Fátima, etc.
El documental que más me aclaró las cosas fue “Jesús versus satanás” Este
documental habla de la llegada del anti-cristo. Dice que vendrán dos hombres,
el de la tierra y el del agua. El de la tierra se dice que será un falso papa,
y el del agua un falso profeta, un hombre muy carismático que vendrá con un falso
mensaje de paz a la tierra a engañar a los hombres, y utilizará el nombre de
Cristo para camuflarse.
No recuerdo si a la semana o al mes después de haber visto este documental, me
llega a través de facebook un mensaje de el grupo “el secreto” (del cual yo por
supuesto estaba unido), y me dice en una frase: “La única manera de crecer
espiritualmente es mediante la obtención de dinero”. Esta frase ya no podía
aclararme más las cosas, pero no es lo único ni lo último. Hay más…
Una amiga de la universidad, me invita a una charla sobre esta “metafísica”,
que se daba en ese entonces (no sé si se seguirá dando), cerca de la plaza
Italia, en el edificio de la telefónica, y esta charla tiene un nombre bastante
interesante: “Metafísica Cristo Redentor”, y recordé otra característica que
traería este mensaje que es “utilizar el nombre de Dios” (el aviso de las
charlas “Metafísica Cristo Redentor” estaba en la estación Vicuña Mackena del
metro).
Más claro que echarle agua, de esto no se puede desprender otra cosa. A
continuación enumeraré otros efectos que produce este mensajito de aspecto
noble.
1. Incentiva al materialismo y la popularidad, haciendo que las personas estén
cada vez más preocupadas de ellas mismas y de la imagen que proyectan.
2. Cambia el concepto de Dios como la Santísima Trinidad, a una supuesta
“energía del universo”, un concepto que no se especifica. Simplemente se habla
de una energía compuesta por todos nosotros, pero la pregunta es ¿cómo una
energía que yo también compongo, sería capaz de enviar a un mesías a la tierra?
3. Contradice el mandamiento de Dios: “hágase tú voluntad en la tierra como en
el cielo”, ya que al aplicar el secreto, estaríamos haciendo nuestra voluntad y
no la de Dios (esta observación la agregó el Cardenal Medina cuando conversé el
tema con él).
4. Tal como el demonio en los primeros tiempos tienta a Eva al decirle: “come,
y seréis como Dios”, este falso mensaje de paz hace lo mismo pero de una manera
camuflada, ya que poco a poco, aumentando la soberbia en las personas, las
convence que después de la vida terrenal, al haber practicado “el secreto”,
tendrán una agilidad tan elevada de este poder, que podrán ser como Dios.
5. En ninguna parte del documental se incentiva a la práctica de los valores y
virtudes, o de algún mandamiento.
6. Convence a las personas que es algo bueno, un mensaje de paz, que es la
manera en que el mundo se salve ya que esto no se puede utilizar para hacerle
el mal a nadie.
7. Así como tenemos pensamientos positivos, también tenemos pensamientos
negativos o desalentadores. El secreto dice que los pensamientos positivos
tienen alrededor de un 90% de efectividad (no recuerdo exactamente), y los
negativos solo un 10%. De esta manera incentiva a que la gente se dedique a
creer en esto sin miedos.
8. Nutre enormemente el ego de las personas (llegando al extremo de igualarse
con Dios).
9. Dice que la Iglesia conoce el secreto pero no lo quiere revelar a la
sociedad para ejercer poder sobre la población. Cosa absolutamente absurda, ya
que si conocen el secreto, no necesitarían controlar nada y, además, ¿para qué
tendrían que adorar a Dios? Esto es un argumento para contraponer a las
personas con el catolicismo.
10. Este cuentito ejerce un efecto dominó, porque quién cree que es cierto, lo intenta enseñar a todos los más cercanos posibles. Lógico, si quiere que sean felices, pero ahí actúa la intervención de Dios cuando impide que se siga esta cadena al hacer que las personas no se interesen en esto.
10. Este cuentito ejerce un efecto dominó, porque quién cree que es cierto, lo intenta enseñar a todos los más cercanos posibles. Lógico, si quiere que sean felices, pero ahí actúa la intervención de Dios cuando impide que se siga esta cadena al hacer que las personas no se interesen en esto.
11. Dice en todo momento que somos
dueños de nuestro destino, que no recibiremos ningún castigo porque Dios
(entendido muy abstractamente como una energía extraña) nos ama, y que la
Iglesia solo nos asusta para tener el control. No opone ninguna restricción
a las conductas reprobables para un cristiano.
12. Todo ateo y agnóstico cae
redondito en el tema, y aún más si se trata de personas con grandes problemas
personales y/o sufren algún tipo de depresión, porque se aferran en esta fe
traidora.
13. Dice que debemos estar siempre
contentos aunque las cosas salgan mal, porque cuando creemos sentirnos felices,
atraemos la felicidad a nuestras vidas, pero está comprobado científicamente
que quienes presentan una actitud positiva frente a la vida, tienen mejor salud
y habilidades para desarrollarse, lo que desencadena en un mayor éxito en todos
los aspectos (o la mayoría).
Cada vez que leo algo acerca de esta
falsa metafísica, puedo ver claramente cómo se cumple una y otra vez el patrón
de conducta del diablo.
Pienso que el falso mensaje de paz
que está en las profecías podría ser este, o tal vez sea parte de uno más
elaborado.
Se dice que este mensaje convencerá a
muchas personas pero no a todas. Yo salí del primer grupo y me integré al
segundo, del cual espero no salir nunca más. Así mismo, espero que con mi
testimonio pueda abrir los ojos de quienes estén cegados con esto, para
que logren encontrar la verdad.